Mastercard y Banco de Costa Rica reciben reconocimiento internacional por habilitar pagos sin contacto en alianza con empresas autobuseras

Londres, 05 de marzo, 2025.  El esfuerzo conjunto de Mastercard y el Banco de Costa Rica (BCR) por digitalizar los pagos en el transporte público ha sido reconocido internacionalmente en el prestigioso evento Transport Ticketing Global 2025 (TTG), celebrado en Londres, Inglaterra, este 4 de marzo. 

Todos los años, TTG reúne a expertos internacionales, autoridades de transporte, operadores y proveedores de tecnología para reconocer las mejores prácticas y casos de éxito a nivel mundial en la industria especializada de pagos en el transporte público. 

Este año, el proyecto tico ha sido reconocido por TTG en la categoría “Esfuerzo unificado para la innovación en el transporte”, destacando el liderazgo del Banco de Costa Rica y Mastercard por su rol en la digitalización de los pagos en más de 1 350 autobuses de la Gran Área Metropolitana (GAM). 

El reconocimiento que esta comunidad de expertos internacionales otorga, evidencia el impacto de la digitalización en la movilidad urbana, mejorando la experiencia de pago de miles de ciudadanos que diariamente utilizan este servicio público y fortaleciendo la infraestructura de pagos digitales a nivel nacional. 

El proyecto, liderado por el Sistema Nacional de Pago Electrónico en el Transporte Público (SINPE-TP) del Banco Central de Costa Rica, tiene por objetivo cubrir 3000 autobuses en la GAM durante el 2025, donde se realiza el 80% de los viajes del país. Su impacto ha colocado a Costa Rica a la altura de proyectos transporte moderno en países de primer mundo. 

Los otros proyectos que participaron en la misma categoría de Costa Rica fueron los siguientes: 

• Proyecto de modernización de la recaudación de tarifas en Nueva Jersey, Estados Unidos 

• Iniciativa de pago sin contacto en el metro de Lisboa, Portugal 

• Sistema unificado de tiquetes para simplificar el pago del transporte en toda la Toscana, Italia 

• Sistema de pago sin contacto de Vilna, capital de Lituania 

“La digitalización del transporte público no se trata solo de habilitar la aceptación de pagos digitales, sino de conectar todo un ecosistema para generar inclusión financiera, eficiencia y desarrollo. Hemos demostrado que cuando el sector público y privado trabajan en conjunto con una visión innovadora, los beneficios para los ciudadanos y el país son enormes. Este reconocimiento global para Costa Rica valida nuestro esfuerzo y nos motiva a seguir liderando la transformación digital en la región”, expresó Kristine Matheson, Cluster Lead para Centroamérica en Mastercard. 

El éxito de la digitalización del transporte público en Costa Rica se refleja en más de 80 000 transacciones diarias que registra el sistema SINPE-TP, lo cual contribuye a una reducción significativa del uso del efectivo en autobuses y trenes. 

Los usuarios ahora tienen la opción de viajar de forma más segura, sin exposición a los riesgos asociados al uso del efectivo, al pagar su viaje con tarjetas de débito y crédito y dispositivos inteligentes como teléfonos celulares, pulseras y relojes. Los adultos mayores además tienen la opción de utilizar la tarjeta de Ciudadano de Oro y la población no bancarizada también podrá acceder a una tarjeta prepago. 

“En el BCR estamos comprometidos con la sostenibilidad por eso nos complace ser impulsores de la eficiencia del transporte público a través del SINPE- TP que a su vez contribuye con la inclusión financiera de las personas y promueve un impacto positivo con una tecnología que aporta practicidad, sencillez y eficiencia. Continuaremos trabajando fuertemente para lograr una mayor incidencia con valor social en nuestras actividades diarias, impactando positivamente a la sociedad, las personas y a todo Costa Rica” afirmó Julio César Trejos Delgado, Gerente General a.i. del BCR. 

Este reconocimiento posiciona a Costa Rica como un modelo a seguir en la región. Es una iniciativa que moderniza el transporte, la movilidad e impulsa la economía digital del país, reduciendo la dependencia del efectivo y promoviendo una infraestructura de pagos más accesible, ágil y segura para toda la población.